Dormir y despertar (1934), F.S. Fitzgerald

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( Sleeping and Waking) diciembre 1934

Este artículo aparece en la recopilación de Edmund Wilson
«The Crack-Up»  (7 pp.)

 

Scott Fitzgerald atribuye a su persistente insomnio muchos de sus males, entre ellos el beber. Aunque para contarlo necesite emplear muchos rodeos un poco paranoides.

El insomnio aparece un día y ya no te deja. Un amigo suyo, por ejemplo, se inició en el calvario por culpa de un ratón que le mordió la mano mientras dormía. Scott cree recordar que fue por culpa de un mosquito hace un par de años, lo que le llevó a una frenética, laboriosa e interminable cacería por la habitación. Aquello fue el comienzo de un sueño que se interrumpiría en mitad de la noche sin solución.

De nada valía hacer todos los preparativos para cualquier contingencia nocturna: agua, medicamentos, libreta para notas, otro pijama por si el que llevas se empapa en sudor, preparación concienciada para conciliar el sueño… perfecto, me duermo, pero, al cabo de un par de horas me despierto, me desvelo y volver a dormir es casi una tarea imposible.

Entonces la cabeza no deja de dar vueltas

«La noche auténtica, la hora más oscura ha empezado.»

la mente te lleva a de un lugar a otro y todos ellos son angustiosos

«El horror ha llegado ahora como una tempestad: ¿y si esta noche prefigurara la noche de después de la muerte?; ¿y si a partir de ahora todo fuera un eterno estremecimiento al borde de un abismo, con toda la bajeza y miseria urguiéndome a avanzar y la bajeza y miseria del mundo esperando ahí delante? No hay elección, ni camino, ni esperanza; sólo la interminable repetición de lo sórdido y lo semitrágico.»

Algo más que una casa (1933), F.S. Fitzgerald

«Algo más que una casa»   (More Than Just a House, 1933)

relato aparecido en la revista The Saturday Evening Post (24 junio 1933)

Francis Scott Fitzgerald

(Cuentos 2 – pp. 639 a 675)

Estamos en 1925, Lew Lowrie es un joven de veintiséis años que salva a las tres hermanas Gunther de ser arrolladas por un tren. A pesar de la gran diferencia social, los padres de las señoritas Gunther invitan a Lew a varias veladas en agradecimiento por su gesto. Las tres hermanas son: Amanda de dieciséis, Jean y Bess más pequeñas.

Los Gunther son una buena familia de un condado cerca de Baltimore en Maryland y viven en una alejada casa en el campo. La casa impone su presencia de forma opresiva porque es como una jaula de sus habitantes y de su nivel social.

«Era algo más que una casa, decidió Lew mientras se alejaba. Era un lugar donde una multitud de cosas diferentes podía suceder a la vez…»

Lew inmediatamente se siente atraído por la hermana mayor, Amanda, e incluso tiene la oportunidad de declararse, pero ella ya está comprometida. En realidad Lew está fascinado por el ambiente de los Gunther, de su deseo de pertenecer a él y ese deseo se deriva hacia las hijas que son las llaves de ese mundo. Sin embargo, el hecho de que sean tres chicas presagia que todo se desmoronará porque el futuro se basará en los posibles afortunados matrimonios que puedan hacer.

Pasa el tiempo y Lew ha mejorado su situación económica. Vive en un ático en Nueva y York y coincide con la hija mediana que hace su vida de flapper en la ciudad de los rascacielos. Tienen un fugaz flirteo, pero no llega a más. Lo invita a la casa al estar ella de vacaciones.

La casa es distinta, la madre ha muerto y el padre tiene demencia. La hija pequeña, Bess, lo cuida. Una terrible tormenta trastorna la velada. Reciben una llamada que les comunica que Amanda ha muerto al dar a luz.

Los años pasan Lew sigue su buena estrella, pero está soltero. Con motivo de un compromiso pasa cerca de la casa de las señoritas Gunther y se encuentra con Bess a caballo: los padres y Amanda fallecidos, Jean casada con alguien en China. Hablan un poco y ella le cuenta que está a punto de casarse. Cuando Lew habla con otra persona se entera que no es cierto y que está sola en la casa: embargada y sin recursos. Va a verla y hablan. Lew se da cuenta que desde siempre estaba ligado a las tres hermanas y la elegida será Bess porque además es la única que ha aprendido el valor de la existencia y la resistencia.

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Se trata del clásico de los cuentos: eran tres hermanos/eran tres hermanas… pero hay que reconocer que Scott le añade pequeños detalles que la singularizan.

Años 20s : La Ley Seca o La Prohibición

La Ley Seca o La Prohibición (Prohibition) de vender bebidas alcohólicas, fue una medida que se impuso mediante ley en Estados Unidos

  • desde el 16 de enero de 1920
  • al 6 de diciembre de 1933.

durante el mandato de los presidentes:

  • 4-3-1913 / 4-3-1921  Woodrow Wilson, demócrata
  • 4-3-1921 / 2-8-1923  Warren G. Harding, republicano (falleció durante su mandato)
  • 2-8-1923 / 4-3-1929  Calvin Coolidge, republicano
  • 4-3-1929 / 4-3-1933  Herbert Hoover, republicano
  • 4-3-1933 / 12-4-1945 Franklin D. Roosevelt, demócrata (falleció durante su mandato)

bien mirado, se impuso y se derogó bajo presidentes demócratas.

En los años anteriores se habían ido desarrollando diferentes movimientos sociales en contra de la bebida que tenían una gran influencia política y social y hasta cierto punto apoyo popular. Desde 1850 las oleadas de emigración procedían de los países más pobres de Europa, con especial incidencia irlandesa y su tradicional problema con el consumo de alcohol (*). Muchos problemas laborales y familiares parecían tener su origen en el consumo de alcohol, así como enfermedades mentales debidas al alcoholismo.

La prohibición tuvo una inesperada consecuencia en el considerable aumento de la delincuencia organizada: los gánsteres. Hecha la ley hecha la trampa. Se vendía alcohol de forma clandestina y pareció que la gente bebió más que nunca. A medida que pasaba el tiempo la impopularidad de la ley fue en aumento hasta que finalmente se derogó.

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(*) el problema del monocultivo de la patata en Irlanda provocaba que grandes masas de población pobre se alimentara exclusivamente de patatas y alcohol. Cuando todos los cultivos de patata fueron arrasados por una epidemia de la planta (hacia 1840), Irlanda se vio abocada a una hambruna que causó millones de muertos y la necesidad de emigrar a Estados Unidos como una vía alternativa.